Galeon de Manila 1747-1748
De Todoavante.es
Línea 1: | Línea 1: | ||
+ | [[Archivo:GM-18.jpg|right|alt=Dibujo de un galeón de finales del siglo diecisiete y hasta principios del diecinueve. A finales del siglo diecisiete cambio la construcción naval, naciendo el navío como buque principal, al disponer de una grada en la ciudad de Manila capital de las islas Filipinas, comenzó la construcción de estos buques para continuar con los viajes a Acapulco, transportando entre otras muchas cosas sobre todo especias. También se enviaron algunos de la península por no poder ser construidos en las islas. Su única diferencia con los navíos de guerra, consistía en ser algo más pequeños y al igual que siempre más pobres de artillería, por causa de ser más en sí unos transportes que buques de guerra como a tales. Su arboladura era la misma que los navíos, con tres palos, trinquete, mayor y mesana y velas cuadras. En la proa como siempre llevaban varios foques.|border|Galeón del siglo dieciocho.]] | ||
==Mando:== | ==Mando:== | ||
Revisión de 09:00 24 mar 2015
Contenido |
Mando:
General don Jaime del Prado.
Salida:
Salió el patache de Cavite el 7 de agosto de 1747. Se despachó sin carga para llevar la correspondencia oficial y recoger el situado. A causa de las calmas no llegó al puerto de San Jacinto hasta el 29 de agosto y, a la espera de vientos favorable, no se hizo a la vela para embocar el estrecho hasta el 10 de septiembre.
Por lo avanzado de la estación encontró mala mar y fuertes vientos. La noche del 23 de septiembre entró un temporal por el nordeste que duró seis días y seis noches. El 29 descubrieron tierra, que reconocieron los pilotos ser el cabo Engaño. Realizada una junta de oficiales, decide el general regresar de arribada a puerto, llegando a Cavite en noviembre.
Buques:
Patache: Santo Domingo de Guzmán. 20 cañones de á 4 libras y pedreros de á 3 libras, 65 hombres. Maestre don Francisco Javier Salgado.
Regreso:
Una vez reparado, el patache volvió a zarpar rumbo a Macao para adquirir vino y otros productos necesarios, regresando a Manila a primeros de junio. Después salió rumbo a las Marianas para surtir al presidio con dinero y pertrechos, al nuevo gobernador don Enrique de Olavide y Michelena y seis familias voluntarias.
Superó un fuerte temporal y su cabo, don Francisco Ruiz, decide regresar de arribada a puerto. Por un error del piloto se encontró al sur de Samar, teniendo que fondear en una ensenada poco segura en el golfo de Leyte, cerca del estrecho de San Juanico. Otro temporal rompió los cables y se hizo pedazos al chocar con unos arrecifes. Murió el capitán, el capellán y cuatro de las mujeres que se iban a asentar en las Marianas.
Bibliografía:
Concepción, Juan de la.: Historia general de Filipinas. Tomo XII. Manila, 1792, pp. 34-35.
García del Valle y Gómez, Jesús.: Retrato de un navío. Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza de la carrera Manila-Acapulco (1733-1750). Bubok, 2011, páginas 106-108.
Navarro García, Luis.: América en el siglo XVIII. Los primeros Borbones. Tomo XI. Ediciones Rialp. Madrid, 1989, página 530.
A.G.I. Filipinas, 453, N. 4. Carta del gobernador de Filipinas don Juan de Arechederra sobre despacho de patache. Manila, 31 de julio de 1747.
A.G.I. Filipinas, 158, N. 10. Carta del marqués de Ovando sobre la arribada del patache. Manila, 6 de julio de 1754.
A.G.I. Filipinas, 153, N. 8. Expediente sobre la arribada del patache. Manila, 11 de julio de 1748.
A.G.I. Filipinas, 455, N. 6. Averiguaciones sobre la arribada del patache. Manila, 11 de julio de 1748.
Compilada por Santiago Gómez.
Todoavante ©