Sabina, Santa (1781)
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Construcción:
Construida en Ferrol con el sistema francés.
Botada en 1781.
Armada con 40 cañones.
Historial:
En enero de 1782 es forrada de cobre en el arsenal de Ferrol. A finales de 1782 se pone al mando del capitán de navío don Ignacio María de Álava y Sainz de Navarrete. En 1784 participa en la expedición científica de Vicente Tofiño para confeccionar el primer gran atlas marítimo de España.
El 20 de febrero de 1784 llegó a Montevideo al mando del capitán de navío don Francisco de Idiáquez y Borja y en conserva de la fragata Santa Perpetua y otros buques de guerra, dando escolta a un convoy de mercantes con tropas del regimiento de infantería Burgos. Llevaban a bordo al nuevo virrey de Buenos Aires, marqués de Loreto. El 18 de mayo de 1784 se encontraba en Montevideo al mando del capitán don Francisco Idiáquez, a su vez nuevo comandante del apostadero de Montevideo. Procedente de Buenos Aires entró en Cádiz el 4 de enero de 1787 con 42.387 pesos para S.M., 673.626 pesos y otros productos para particulares.
En septiembre de 1788 zarpa de Cádiz al ser destinada a servir en el apostadero de Buenos Aires, al mando del capitán don José Orozco y Herrera, sustituyendo a la fragata Nuestra Señora de la O y al comandante de Buenos Aires don Antonio Basurto. Estando en Buenos Aires es relevada del servicio por la fragata Santa María Magdalena, pasando a ser mandada por el capitán de fragata don Manuel Bilbao.
El 22 de julio de 1790 zarpa de Montevideo, y el 1º de octubre de 1790 llega a Cádiz con 175.709 pesos y 186 sacas de lana de vicuña para S. M., y para particulares 332.694 pesos, 6.000 pieles de guanaco, 83 de cisne, 36 de tigre y 173 plumeros. En 1790 se encontraba asignada al departamento marítimo de Cádiz.
Al comenzar el año 1793 se encontraba desarmada al departamento de Cádiz. El 20 de mayo de 1793, en el puerto de Cádiz, es puesta al mando del capitán de navío don José Justo Salcedo. Al mando del comandante Salcedo realizó una patrulla en las islas Azores en 1793. En conserva de la fragata Santa Dorotea realizó una nueva patrulla en aguas de las islas Azores, capturando una corbeta mercante británica que llevaron a Cádiz.
Incorporada a la escuadra del teniente general don Francisco de Borja, zarpa de Cádiz rumbo al mar Cantábrico. Entró en Santander para dar instrucciones a la división del brigadier Goicoechea. El 13 de julio de 1794 zarpó de Ferrol con otras unidades para socorrer a los náufragos del navío Magnánimo, embarrancado en la isla Sisarga. Llegó a la zona del siniestro la tarde del 13 de julio. Posteriormente pasó al Mediterráneo, llegando a Mahón en mayo de 1794 al mando del capitán Salcedo. El 15 de julio de 1794 se le da su mando al capitán de fragata don Juan Darrac Jepson.
A finales de septiembre de 1794 pertenecía a la escuadra del Océano y se encontraba en la bahía de Cádiz al mando del capitán de fragata don Juan Darrac. El 18 de junio de 1795 entra en Barcelona con la fragata danesa capturada Gran Turco, al mando de Conrad Bruun. Dejó su mando el capitán Darrac el 4 de septiembre de 1796.
El 20 de octubre de 1795 sale de Cartagena con tropas rumbo a Málaga, las que había traído desde Barcelona la fragata Santa Brígida. El 2 de agosto de 1796 zarpa de Cartagena con otras tres fragatas, Paz, Casilda y Ninfa, rumbo a Cádiz para incorporarse a la escuadra del Océano. El 3 de octubre de 1796 capturó cerca del cabo de Gata al lugre británico Experiment, de 10 cañones, 111 toneladas y al mando del teniente George Hayes.
Durante la noche del 19 de diciembre de 1796 navegaba en compañía de la fragata Santa Matilde cuando tuvo un encuentro con las fragatas británicas Blanche y Minerve. Después de un combate de dos horas, la fragata Sabina fue apresada por la Minerve, en la que izaba su insignia el comodoro Horatio Nelson y mandada por el capitán George Cockburn. Durante el combate tuvo la española 2 muertos y 48 heridos. Cuando la fragata Matilde ya se había librado del acoso de la Blanche y regresaba al escenario del combate, apareció en el horizonte la escuadrilla al mando de don José de Córdoba con el navío Príncipe de Asturias y las fragatas Ceres y Perla, que persiguieron durante todo el día 20 de diciembre a los británicos, hasta que Nelson decide soltar a la presa, entrando los buques españoles en Cartagena el día 21.
Al mando del capitán de fragata don Miguel María Gastón de Iriarte, desde el 30 de diciembre de 1796, realiza varios cruceros con otras fragatas sobre las costas de Cataluña e islas Baleares, siendo después agregada a la división de fragatas del capitán de navío Juan Pablo Lodares con la que debe dirigirse a Cádiz. A mediados de 1797 entró en el puerto de Barcelona con las fragatas Flora, Soledad, Santa Teresa y el bergantín Vencejo. Embarcan pertrechos militares para ser desembarcados en Cádiz.
A causa del bloqueo británico quedó la fragata en Algeciras montando la insignia del jefe de escuadra don Bruno Heceta, comandante del apostadero de Algeciras. En 1798 capturó, en conserva de los bergantines Ligero y Cazador, a un paquebote británico cerca de Gibraltar. Entró finalmente en Cádiz al mando de Gastón el 7 de julio de 1799.
El 3 de abril de 1800 zarpa de Cádiz con las fragatas Carmen y Florentina, escoltado un convoy de mercantes con tropas y pertrechos para el Callao de Lima. Buques de guerra británicos atacan el convoy el 7 de abril, capturando a las fragatas Carmen y Florentina, mientras la Sabina consigue entrar en Cádiz el 9 de abril. Los buques mercantes aprovecharon la confusión del combate para huir, consiguiendo llegar a sus destinos sin la escolta de las fragatas.
Formando parte de la escuadra de don Juan Joaquín Moreno zarpa de Cádiz en julio de 1801 rumbo a Algeciras para auxiliar a la escuadra francesa del contralmirante Linois. En la fragata habían embarcado los dos comandantes, ocurriendo el desgraciado combate del estrecho la noche del 12 al 13 de julio, donde los navíos Real Carlos y San Hermenegildo explotaron.
El 13 de noviembre de 1801 hizo viaje desde Cádiz a la América septentrional para llevar la noticia de la paz con Gran Bretaña. Entró en Cartagena de Indias el 11 de diciembre, regresando después a Cádiz.
A primeros de junio de 1802 zarpa de Cádiz con la escuadra de Domingo de Nava para operar en la costa africana. La escuadra fondea en Argel. El navío Bahama y la fragata Sabina son destacados a Túnez al mando de Dionisio Alcalá Galiano. La fragata regresa a Cartagena el 17 de julio de 1802. En septiembre de 1802 zarpa de Cartagena con el navío San Joaquín para llevar caudales a Mallorca y Barcelona.
El 2 de julio de 1803 zarpa de Cádiz, al mando del capitán de navío don Miguel Gastón, rumbo a Cartagena de Indias llevando a bordo al nuevo virrey. Entró después en Veracruz el 23 de agosto para desembarcar 2.000 quintales de azogues y otros géneros. El 9 de junio de 1804 sale de Veracruz rumbo a Cádiz con caudales acompañado de las fragatas Anfitrite y Venganza, fondeando en Rota el 16 de octubre de 1804. Al día siguiente se dirige a Vigo para llevar caudales. A primeros de diciembre desembarca por enfermedad el capitán de navío Gastón.
En 1805 se encontraba armada y asignada al departamento de Cádiz. Al mando del capitán de fragata don Joaquín Núñez zarpa de Ferrol y entra en Cádiz el 13 de octubre de 1809 con pertrechos de guerra. Durante el asedio de Cádiz del ejército francés en 1810 actuó por un tiempo contra los corsarios franceses frente a la costa de Algeciras. El 2 de septiembre de 1810 es puesta al mando del capitán de fragata don Roque Guruceta, cesando en su mando once meses más tarde.
En marzo de 1811 estuvo carenándose en el arsenal británico de Portsmouth con la fragata Prueba dadas las carencias de nuestros arsenales. En abril de 1811 zarpa de Cartagena para operar en aguas de Málaga contra los corsarios franceses.
Por Real Orden del 7 de julio de 1813 se concede su mando al capitán de fragata don Luis Coig, que se hace cargo de la fragata al día siguiente. Realiza varias comisiones en el Mediterráneo y un viaje a la América septentrional, tocando en Puerto Rico, la Habana y Veracruz, cesando en el mando el 12 de marzo de 1815.
El 12 de marzo de 1814 zarpa de Cádiz rumbo a Argel y Trípoli, regresando a Cádiz el 11 de junio. Vuelve a zarpar rumbo a Alicante el 31 de agosto, regresando a Cádiz el 12 de diciembre. Finalizada la guerra, el 13 de octubre de 1814 zarpa de Mallorca con profesores y 60 alumnos del Real Colegio de Artillaría para su traslado a Segovia, mandados por el brigadier don Joaquín Ruiz de Porras, fondeando la fragata en Alicante el 19 de octubre.
El 14 de abril de 1815 zarpa de Cádiz al mando del capitán de navío José Sartorio y Perol escoltando un convoy a Tierra Firme de cinco fragatas mercantes y una polacra con pertrechos y tropas del mando del brigadier Miralles. El 26 de julio se presentó en la boca del puerto de San Juan de Puerto Rico. Dejó al bergantín San Miguel, que llevaba 1.815 quintales de azogue. Regresa a Cádiz el 27 de mayo de 1816.
El 10 de diciembre de 1816 zarpa de Cádiz con correspondencia rumbo a la Habana y Veracruz. Llegó a Veracruz el 18 de julio. El 5 de enero de 1817 zarpa de Cádiz al mando del brigadier don Francisco de Berenguer escoltando un convoy de tropas, compuesto por 20 mercantes, a la Habana y Veracruz.
En mayo de ese año zarpa de Veracruz con las goletas Belona y Proserpina para combatir a tres buques y tropas al mando del insurgente Francisco Javier Mina, que habían desembarcado en Soto de Marina, Nueva Orleáns. El 17 de mayo atacó la flotilla con botes armados, abordando y quemando a la fragata Cleopatra y obligando a embarrancar al bergantín Neptuno, escapando el tercer buque. Regresó a Cádiz el 16 de octubre de 1817 desde Veracruz y la Habana.
El 15 de enero siguiente dejó el mando de la fragata el brigadier Berenguer. Vuelve a zarpar de Cádiz el 28 de julio de 1819 en conserva del bergantín Ligero y un convoy cargado de tropas y pertrechos con destino la Habana y Veracruz. A primeros de diciembre de 1819 zarpa de Veracruz y llega a Cádiz con correspondencia el 28 de enero de 1820.
A mediados de abril de 1820 se encontraba en Cádiz alistada para la comisión de llevar a América la noticia del Real Decreto de convocatoria a Cortes y demás noticias del nuevo régimen constitucional de la Monarquía.
La fragata Sabina pasó desde ese momento a llamarse Constitución.
Acompañada por la fragata Viva, zarpa de Cádiz el 18 de mayo de 1820, pasó por los puertos de Tenerife, Puerto Rico, la Habana y Veracruz. Llegó de pasajero al jefe de escuadra don Tomás de Ayalde, nuevo comandante de la escuadra y apostadero de la Habana. A Puerto Rico llegó el 15 de junio de 1820. Tras dejar la correspondencia, prosiguió rumbo a la Habana.
Por real orden del 15 de marzo de 1823 se concede su mando al capitán de fragata don José María Chacón. Al mando del comandante Chacón, salió de Cádiz el 27 de mayo de 1822 para cruzar sobre los cabos de San Vicente y Santa María y dar protección a la llegada de los buques que venían de América, regresando a Cádiz el 7 de julio.
El 7 de octubre de 1822 zarpa de Cádiz con correspondencia rumbo a la Habana y Veracruz, escoltando un convoy a las islas Canarias, donde se quedaron parte de los buques, continuando rumbo a Puerto Rico, Habana y Veracruz.
El 3 de abril de 1823 zarpa de la Habana rumbo a Puerto Rico con la corbeta Ceres, ambas naves a las órdenes del capitán de navío don Ángel Laborde, que se encontraba embarcado en la fragata, mandada por el capitán de fragata don José María Chacón , mientras la corbeta estaba al mando del teniente de navío don Martín María de Espino. El 17 de abril se hacen a la vela desde la Aguadilla, Puerto Rico, y ponen rumbo a Puerto Cabello para levantar el bloqueo. Al amanecer del 1º de mayo se encontraban a unas 6 o 7 leguas de Puerto Cabello y a las diez y media avistan la corbeta Infanta María Francisca seguida de cuatro goletas, ordenando Laborde su caza. La escuadrilla enemiga se reunió con otra escuadrilla al mando del comodoro Danells, formada por la corbeta Carabobo, un bergantín y otras dos goletas. Tras la reunión de estos buques, Danells ordena forma una línea de combate para enfrentarse a los españoles. A vanguardia se encontraba la corbeta Infanta María Francisca, armada con 22 cañones, a su popa la corbeta Carabobo, de 28 cañones, y en el claro entre ambas la goleta Leona, armada con un cañón de a 18 libras, 3 de a 9 y tripulada por 80 hombres. A popa del Carabobo navega el bergantín Independencia, armado con 14 cañones y tripulado por 140 hombres. A retaguardia se situaron, sin formación alguna, las goletas de guerra Manuel, Rayo, Flor de Mar y dos goletas desarmadas. Comenzó el combate a las cuatro de la tarde. Las dos corbetas colombianas dirigieron sus tiros contra la arboladura de la fragata española, pero no consiguen rendirla. Por el contrario, las dos corbetas se rinden a los buques españoles. El resto de la escuadrilla se puso en fuga tras los primeros disparon. Sólo aguantó el bergantín Independencia, que se separó al poco tiempo tras los disparon de la corbeta Ceres. Los daños en la fragata impidió perseguir a los fugados y la corbeta Ceres tuvo que permanecer cerca de la fragata pues ésta tenía las lanchas destruidas y fueron necesarias las de la corbeta para realizar el traspaso de prisioneros y la marinería necesaria para marinar las corbetas.
Al día siguiente del combate, el 2 de mayo, fondeó la fragata en Puerto Cabello, mientras las corbetas fondearon en la costa de Golfo Triste. Pocos días después, con la ayuda que envió Laborde desde Puerto Cabello, las corbetas pudieron llegar a puerto, la Carabobo al mando del teniente de fragata don Antonio Pallera y la Infanta María Francisca al mando del teniente de navío don José Maestre. La corbeta Carabobo pasó a llamarse Zafiro.
Tras reparar los daños del combate en Puerto Cabello, puso rumbo al lago de Maracaibo. En el apostadero de los Tagues dejó a sus cuatro buques más grandes a cargo de don José María Chacón, comandante de la Constitución/Sabina, y fue a la caza de la escuadrilla enemiga. Habiendo perdido algunos de los buques en los combates producidos los días 22, 23 y 24 de julio, llegó Laborde a Tagues y salió rumbo a Puerto Cabello para reunirse con las corbetas apresadas. Puso rumbo a la Habana con todos los buques, cuando toda la costa de Tierra Firme había caído en manos del enemigo.
El 15 de febrero de 1825 zarpa de la Habana con tropas y pertrechos destinados al castillo de San Juan de Ulúa, regresando a la Habana el 6 de marzo. En febrero de 1825 escoltó a los bergantines mercantes Hindus y Níger desde San Juan de Ulúa a la Habana. Completaba la escolta la fragata Hoffnum y las corbetas Infanta María Doña Francisca y Zafiro. El convoy estaba al mando del capitán de navío don Ángel Laborde y traía a 542 hombres, de ellos 110 eran enfermos y siete presidiarios, pertenecientes a Infantería de Marina, artillería, ingenieros, marineros y batallones de Tarragona, Málaga y Cataluña. La fragata Sabina quedó varada cerca del puerto de la Habana, siendo necesarios 12.000 pesos para su reparación. Realizó otras dos travesías con tropas y pertrechos rumbo a San Juan de Ulúa, ya como capitán de navío el comandante Chacón, ascendido el 14 de julio de 1825.
A finales de septiembre de 1825 zarpa de la Habana con la fragata Santa Casilda y la corbeta Aretusa para llevar artillería, víveres y pertrechos a San Juan de Ulúa, convoy que estaba al mando del brigadier don Ángel Laborde. Un temporal malogra la expedición, regresando a la Habana el 29 de octubre, sin conocer en la Habana que la última plaza realista en Méjico se ha rendido. La fragata quedó sin arboladura, como un pontón, regresando a la Habana con aparejo de fortuna.
En 1826 se encontraba entre las unidades navales del apostadero de la Habana, fuerzas que estaban al mando del brigadier don Ángel Laborde y Navarro.
Dada de baja y desguazada en 1828.
Bibliografía:
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Compilada por Santiago Gómez.
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